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No doy esta calificación en base al hotel ni a sus servicios. Me ha parecido un buen hotel con un desayuno variado y un personal estupendo, exceptuando a la recepcionista de noche (Nieves), que amargó mi estancia.|La noche que llegué (17/05), vino un amigo a las 02:27H a visitarme y a traerme un obsequio, ya que hacía años que no nos veíamos. Al llegar, esta recepcionista, me llamó a la habitación y me dijo que había una persona abajo. Le respondí que era un amigo que me traía algo y que subiera, a lo que me dijo que, de ninguna manera, que tenía que bajar yo. Cuando bajé, le dije que cuál era el problema y me dijo (de muy malas maneras) que si se iba a quedar a dormir, que tenía que pagar un suplemento. En ningún caso se iba a quedar a dormir pero por no discutir, le dije que me cargara el suplemento a la habitación, a lo que me respondió, de manera muy borde, que tenía que pagar en el momento. "Es que por seguridad no puede subir nadie a la habitación" me dijo. A lo que yo contesté: es un amigo y no hay ningún problema de seguridad.|No entiendo para qué se deja el número de tarjeta como garantía si no se puede cargar nada a la habitación. Dicho suplemento (21€), incluía la estancia de toda la noche y el desayuno.|Nos tomamos algo en mi habitación y pedí un Uber a las 04:19H que es cuando salió de la habitación. En total estuvo 1:52H. |Tengo que añadir que he estado en muchos hoteles de la cadena Meliá y jamás me ha pasado nada parecido. Todo el personal en los hoteles ha sido muy amable y con unos estándares de atención al cliente que esta señora no tiene. Por poner varios ejemplos: el Innside Gran Via, el Meliá Castilla, RedLevel Palcio de Isora, Meliá Sitges, Meliá Maria Pita, Innside Barcelona Apolo, Meliá Atenas, Meliá Fuerteventura, Incluso el Meliá Puerto Vallarta... Nunca me han puesto ninguna objeción cuando han venido amistades a visitarme independientemente de la hora (y algunos han venido por la noche). |Al día siguiente, salí de mi habitación al mediodía y puse el cartel de "hagan la habitación". Cuál es mi sorpresa, cuando al volver a las 4 de la tarde, me encuentro que la puerta de mi habitación no está cerrada. Y luego me habla esta recepcionista de seguridad|Lo peor fue la última noche, cuando volví al hotel. Estaba esta recepcionista (Nieves) de turno otra vez haciendo un check-in y esperé a que terminase para aclarar la situación. Mientras estaba con los clientes, me dijo: qué quiere? y le dije: hablar con usted. A lo que me contestó de malas maneras que esperase. |Esperé y empezamos a hablar de lo sucedido. Ella se escudaba en que no pueden dejar subir a repartidores a las habitaciones. Perdon? En ningún momento dije que fuese un repartidor; sino que era un amigo. También mintió diciendo que este amigo, estuvo hasta las seis de la mañana. Tengo los recibos de uber que demuestran que sólo estuvo una hora y cuarenta y cinco minutos. |Mientras estábamos hablando, vino otro cliente a hacer el check-in y me dijo de forma muuuy borde: apártese que voy a atender a este Señor. Perdon? Yo soy un cliente de segunda?|Esta recepcionista intentaba escudarse utilizando mentiras para salir del paso. Y desde luego, su actitud deja mucho que desear estando cara al público. No tiene nada que ver con la vocación de servicio y la exquisita atención al cliente que tiene el personal de Meliá.|Quiero insistir en que la puntuación que doy es por la mala actitud de esta recepcionista. Debería recibir algún curso para reciclarse o cambiar de profesión.|Muchas gracias.
