HOSTAL Restaurante Los Rosales - Almazcara, León

David Gómez

No puedo valorar mucho pues sólo paramos a desayunar, y la verdad que bastante caro, además de ser autoservicio y tener que recogerlo tú de la barra. La mantequilla dura como el acero para poder juntarla .
El sitio si es amplio y acogedor.

Laura B

Nunca he visto un lugar como este, en la cocina hacen verdaderos esfuerzos para estropear la mercancía alimenticia que pasa por allí. La escasa calidad de los productos se ve amenazada por los... Manazas... que pululan por el local. Menú 27 euros, lasaña, era un destrozo del día anterior, segundo pollo al horno recalentado tres veces y acompañado de patatas fritas con el mismo tratamiento térmico, vino y casera, vino de cuarenta padres cosechero y rellenado, gaseosa marca bellota, postre mus de limón, amasijo de yeso con virutas de cáscara de limón reutilizado. Café marca Lassatuz, tomarlo y

Sonia Godayol

Los menús muy bien de precio.
Los primeros muy buenos, los segundos deberían de mejorar la calidad de la carne ( la región da para ello).
Los camareros muy atentos y amables.......
Los postres caseros y muy buenos.
Si la carne fuera un pelin mejor......serían de 10.
En general satisfecha.
Insisto camareros genial.

george martin fernandez

Los camareros muy atentos, la comida es buena, el menú del día está muy bien y nos atendieron estupendamente.

Notamos cariño en el trato y eso se agradece cuando estás de viaje. Se nota que es algo familiar.

La gente que critica estos restaurantes de paso, deben comer todos los días en estrellas Michelin….

Jose Dovalo

No es la primera vez que me alojaba en el hotel, sí la primera en invierno: 27 de Diciembre.

La calefacción (individual por habitación) no iba, me explicaron que a causa de una avería en la caldera debía ponerla bajita. Así lo hice, pasé de modo nevera a modo menos que templado. Al menos el agua caliente funcionaba.

El empleado de la cafetería, el único presente, se ofreció a que cuando acabase su turno, 23:30, buscaría un radiador y me lo llevaría a la habitación. Debió olvidarse o no encontró ninguno.

Después de dormir vestido y aún así pasar un frío gélido, me levanté y el agua caliente

Raul Bilbao

Curioso lugar. Al entrar parece un plató de cuéntame. Viejuno, setentero, con una sensación de abandono y dejadez. Nos atiende muy amablemente un chico joven algo despistado. Valor y tras ver la carta con buenos precios pedimos un par de bocadillos y unas coca colas. El pollo sin hacer del todo por dentro ( le puede pasar a cualquiera!) Y tras comentarlo con educación vuelve para cocina sin ningún problema. La tortilla muy rica. Buen tamaño y pan del de verdad, algo que se agradece. Después dos cafés ( de nuevo se equivoca con uno y rectifica sin problema) , servicio y a seguir el viaje.
Param

Lorena Sanchez

Malísima experiencia.

Los platos combinados carísimos para lo que traen. ¿Ensalada? De dudosa calidad la lechuga, y el tomate (inexistente)…. Estaba delicioso…

El menú del día no está mal, lo malo que te ponen el primer plato para comer y el segundo para cenar. Y eso que el restaurante estaba “vacío”.

El menú de la parrilla… el primero fenomenal, pero a lo que llaman parrilla… de cerdo ibérico y abundante, por no hablar de la tapa de embutidos…(Ironía). Lo mejor de este menú ha sido el cuchillo.

Alberto Ortega Ortega

Hemos parado a desayunar y no volveremos nunca más. Pedimos tostada de pan con aceite y tomate y era minúscula en tamaño, dura como una piedra y el tomate de bote orlando que sabía a metal,...seguro que el mismo que utilizan para los macarrones..Eso sí, el precio 2,20€ como si fuera de máxima calidad.
El aspecto de la cafetería deja mucho que desear en mobiliario y limpieza.
Ya está bien de tanto abuso a los clientes,