Casa Alaman - Centenero, Huesca

Casa Alaman es un encantador hotel ubicado en la Calle Alta, s/n, 22830 Centenero, Huesca, España. Este alojamiento ofrece una experiencia única para aquellos que desean disfrutar de la tranquilidad y belleza de la región de Huesca. Con una ubicación privilegiada en un entorno natural, Casa Alaman es el destino perfecto para aquellos que buscan relajarse y desconectar de la rutina.

Si deseas ponerte en contacto con Casa Alaman, puedes hacerlo a través del teléfono 677620636 o visitando su página web: mateusstravelexperience.com. En su página web encontrarás toda la información necesaria para planificar tu estancia en este acogedor hotel.

Las especialidades de Casa Alaman se centran en ofrecer un servicio de hospedaje de alta calidad, con habitaciones confortables y un ambiente acogedor. Además, su ubicación estratégica permite a los huéspedes disfrutar de la naturaleza y realizar actividades al aire libre en los alrededores.

Esta empresa cuenta con una reputación sólida, respaldada por las opiniones de sus clientes en Google My Business. Con un total de 30 valoraciones, la opinión media sobre Casa Alaman es de 4.7/5, lo que refleja la satisfacción de quienes han tenido la oportunidad de hospedarse en este establecimiento.

Si estás buscando un lugar tranquilo y acogedor para tu próxima escapada, Casa Alaman es la elección perfecta. No dudes en ponerte en contacto a través de su página web para reservar tu estancia y disfrutar de todo lo que este encantador hotel tiene para ofrecer.

Opiniones de Casa Alaman

Teresa PF

5/5

Que después de recorrer unos pocos kilómetros por esa carretera, casi camino rutal, se llegue finalmente a Casa Alamán es una sorpresa de lujo !!! Descubrir sus interiores de la mano de Adrián y José Luis, una maravilla. La casa es preciosa y que sólo sean 3 habitaciones permite un trato personal maravilloso. Cada uno de los ambientes es precioso. Y los desayunos y las cenas, ricos, ricos. Pasamos 3 días allí y me sentí una privilegiada por poder disfrutar de una hospitalidad de lujo en todos los sentidos.

olpre45

0/5

Hemos tenido el privilegio de alojarnos en Casa Alamán: ¡Un gran hallazgo!. Un pequeño y exclusivo hotel rural enclavado en Centenero, un encantador pueblo de la comarca de Hoya de Huesca, flanqueado por casonas tradicionales con enormes chimeneas coronadas con los "espantabrujas". Un lugar donde las agujas del reloj se detienen y nos invade una tranquilidad ideal para desconectar del ritmo frenético que a veces envuelve nuestras vidas. José Luís y Adrián, sus dueños, os acogerán calurosamente. Amables, simpáticos, cercanos,...siempre pendientes de sus huéspedes. Disfrutad de sus magníficos desayunos en una terraza con vistas espectaculares al paisaje protegido de San Juan de la Peña y Monte Oroel. Os recomendamos que probéis sus deliciosas cenas, ejecutadas con mucho cariño. Descubrid todos los bellos rincones de la casa. Su decoración es fabulosa y en ella, sin duda, se refleja la gran personalidad de sus anfitriones (no os va a dejar indiferentes). Y, sobretodo, relajaros en su coqueta piscina exterior. Casa Alamán posee una ubicación ideal para realizar senderismo (sendero romano GR95), callejear por diminutas villas (Ena, Osia, Botaya, Anzánigo,...), bañaros en las Pozas de Triste o visitar su Museo dedicado a los Telares, dejaros impresionar por los Mallos de Riglos, el Castillo de Loarre, los Monasterios de San Juan de la Peña y el paraje que lo envuelve (entrad en el Centro de Interpretación de la Naturaleza. Sus guías os explicaran todo lo que queráis saber sobre fauna y flora), remojaros en el río Gállego, acercaros a la Estación de Esquí de Formigal, pasearos por Jaca,...En nuestra mente, quedarán ya por siempre grabadas un cúmulo de maravillosas sensaciones.

virblanco

0/5

Nuestra estancia en verano coincido con una ola de calor que nos limito bastante en cuanto a visitas por la zona pero nos "obligo" a disfrutar mas de la casa. Esta decorada con muchisimo gusto, muy acogedera y chic, y una piscinita que nos salvo la vida;-) con vistas espectaculares ! Se come realmente genial, nada que envidiar a muchos restaurantes de moda, aunque sugeriría proponer menus mas sencillos (y baratos) para niños. Nuestra habitacion era comoda, espaciosa y elegante; una pena solo que no hubiera manera de dormir algo mas al fresco en esas noches sofocantes de verano, porque abrir las ventanas era imposible debido a los mosquitos y otros insectos por todas partes -pleno campo, claro- Y de hecho, mi marido y yo nos fuimos acribillados por insectos (que estaban por la cama) y nos decepciono un poco la reacción algo desentendida de los propietarios...Pero el resto fue perfecto y desde luego es un lugar a descubrir, quedan pocas aldeas así donde alojarse a ese nivel.

sagarzati

0/5

La estancia en Casa Alaman ha sido excepcional en todos los sentidos.||La atención recibida por sus dueños José Luis y Adrián ha sido exquisita y con sumo gusto por el detalle. Suficiente para atender a todas nuestras necesidades, pero sin en ningún momento invadir la intimidad lo cual no es tarea sencilla, dado que no hemos abandonado la casa prácticamente en los 4 días.||El desayuno y la cena son dignos de elogio hacia el chef Adrián tanto en calidad de los platos como en presentación. José Luis se encarga de que el gusto por el detalle siga presente a cada paso que damos; ¡hemos utilizado una vajilla distinta en cada desayuno!||Las zonas comunes de la casa están decoradas con mucho gusto. Disfrutamos observando cada uno de los objetos parte de dicha decoración. La casa dispone de varias estancias para distintos usos, mientras que la piscina es un lujo en verano. Las habitaciones, cada una con un estilo diferente, son elegantes, muy limpias y acogedoras. Nosotros nos acomodamos en una de colores vivos en el primer piso.||El paraje donde se sitúa esta casa de estilo pirenaico es ideal para el descanso y la tranquilidad, aunque pudimos disfrutar de algún que otro paseo en bici. ||La relación calidad precio nos ha parecido muy buena, pero sobretodo agradecemos que todavía existan personas que quieran crear este tipo de experiencias que son cada vez más difíciles de encontrar.||Un 10.

birranero

0/5

Recomiendo esta magnifica casa rural chic y acogedora a todo tipo de clientes que sepan apreciar el buen gusto, la decoración, el relax y la paz de la mano de sus increibles anfitriones Adrián y José Luis. Disfrutar de sus menus cerrados exquisitos y servidos con mucho cariño, con productos locales y ecológicos, sus magnificas vistas y su coqueta piscina. Pasamos un magnifico día en Casa Alamán y además, se nos olvido la merienda del bebé, y nos preparamos un potito gustosamente.

Ruben Leon

5/5

Calidad personal increíble. Desayuno muy completo y cocina elaborada y muy rica. La casa es simplemente preciosa, con un gusto por el diseño muy bonito y confortable. La habitación, las vistas, la parte exterior....todo es reseñable positivamente. Buen lugar para tomarse unos días de descanso o para animarse con rutas y senderos de la zona. Un 10 en general.

Toni G

0/5

Hemos estado 5 noches ,y volveremos.||Trato excelente de José Luis y Adrián. Hotel decorado al detalle y con unas habitaciones excelentes. El hotel mas silencioso y cómodo en el que me he alojado.Excelente para reponer fuerzas con la pareja o en mi caso con mis hijas. Y ganar peso con los desayunos y cenas que preparan. Tiene piscina privada y varias terrazas para disfrutar de las vistas y de la naturaleza. || .Lo único malo que tiene es que no te puedas quedar alojado indefinidamente...

ja_eva1

0/5

Casa rehabilitada con gusto exquisito en un enclave privilegiado. Desde las habitaciones puedes ver San Juan de la Peña, buena parte del Pirineos y la Peña Oroel. Nunca hubiese imaginado, poder estar en su terraza contemplando esa postal en un remanso de paz y en un pueblo que casi soy incapaz de situar en un mapa. José Luis y Adrián cuidan al máximo los detalles y son excelentes anfitriones. Este descubrimiento ha sido casual para una celebración de 50 aniversario con amigos, pero no dudaré en escaparme en breve con mi pareja, a disfrutar de Casa Alaman. Aprovecho para decir, que tienen una restauración exquisita también!